Seguramente has escuchado hablar sobre los masajes y sobre su efecto relajante pero, ¿sabías que también tienen una utilidad terapéutica? Así es, los masajes pueden ser aplicados para mejorar nuestra salud.

Existen diferentes tipos de masaje, que pueden ir desde una caricia suave hasta una presión intensa, todo depende de la finalidad de dicho masaje.

Actualmente los masajes se consideran como una parte fundamental de la medicina integradora. Cada vez son más las veces que se ofrecen como parte de una terapia estándar para tratar diversas afecciones o situaciones médicas.

Los masajes tienen diversos beneficios como la reducción del estrés y el aumento de la relajación. Esto, en casos de ansiedad o nerviosismo es muy recomendado.

También reducen el dolor producido por tensión o inflamación de los músculos. Así que en el caso de personas que tengan una actividad física extenuante son ideales.

Disminuyen la frecuencia cardiaca y la presión arterial por lo que se recomiendan en casos de hipertensión.

Y por si fuera poco, aumentan la función inmunológica de nuestro cuerpo. Lo que nos ayudará a combatir de mejor manera las enfermedades.

Hay masajes específicos recomendados para cada afección.

Así que ya sea que por terapia o simplemente por liberarte del estrés y relajarte, un masaje es una excelente forma de darle a tu cuerpo un respiro.

¿Te gustaría intentarlo? ¡Anímate! Pregunta por el tipo de masaje que mejor se adapte a tus necesidades.