JÉSED DE MALJUT
El Amor en la Dignidad
Maljut es la recepción de todas las emociones a través del cauce de Yesod (el fundamento). En Maljut encontramos nuestra independencia y confianza en nosotros mismos. Si una persona considera y respeta (Jésed) a los otros, los demás la respetarán, por lo que se logrará el objetivo propuesto. La amabilidad es el rasgo fundamental de Jésed; no es el amor interno que no se puede manifestar, sino la amabilidad en acción dentro de la materia.

Para ser persona debo obtener mi independencia, pero, a su vez, debo respetar a los demás. Mi independencia no debe ser considerada como una herramienta de sometimiento de los otros. Sin embargo, no solamente debo respetar a los demás, sino comportarme como un hermano con mi prójimo. Mi autoridad debe surgir de la buena voluntad, de considerar la libertad del otro, de encauzar la bondad dentro de la realidad material. Mi autoridad moral debe ser fruto, no del ejercicio autoritario, sino del amor que transmito. Mi relación debe estar basada en un amor equilibrado, no en un amor entendido en términos de sometimiento. Someter al otro, o someterse al otro, nunca puede ser considerado amor.