GUEVURÁ DE YESOD
La Fortaleza en la Unión
Una unión real se debe realizar sobre la base de un gran respeto hacia quien nos vinculamos. Debe existir un espacio individual para el otro. El otro, aunque se una a nosotros, sigue siendo otro y debe ejercer su libre albedrío. La fuerza real de la unión depende de la independencia de sus miembros.

No debo controlar al otro ni que el otro me controle a mí. No puedo unirme a una persona si pretendo controlarla y dominarla, esto no significa unión. Tampoco mi unión puede provenir de la desesperación personal. No debo vincularme y unirme con personas que se encuentran en el lado del mal, porque me harán daño. La fortaleza para unirme es mi propio libre albedrío, el desarrollo libre de mi personalidad. Me uno mientras más respeto tengo por los otros y mientras los otros tengan más respeto por mí. Mis relaciones, para una verdadera unión, necesitan de la restricción de Guevurá. Si existe un verdadero respeto entre las partes, lograremos una verdadera unión.