JÉSED DE TIFÉRET
El Amor en el Equilibrio
El amor debe ayudar a nuestro equilibrio. Si el amor nos desequilibra, es negativo. Algunos cabalistas denominan a la sefirá de Tiféret como compasión, y otros la llaman dimensión de la verdad. Sin embargo, no parece adecuado identificar a Tiféret con la verdad, simplemente porque se encuentra en el centro del Árbol: La verdad solo se encuentra en el Ein Sof y es inestable al ser humano. La verdad es de Dios. Tiféret marca el equilibrio general de las emociones, de Jésed y Guevurá. ¿Cuál es el componente de amor que debemos tener en la armonía? Tiféret representa la síntesis de Jésed y Guevurá y, por lo tanto, es el amor ajustado en los límites correctos. Pero Tiféret también supera la energía de esa síntesis. Es aquí donde alcanzamos la armonía de Tiféret.

Debo amar a los demás, pero debo amarme, también, a mí mismo. Debo amar equilibradamente. El amor me hace compasivo y, entonces, puedo equilibrarlo. Un amor a los otros, sin amor a mí mismo, me conduce a formas horribles de subordinación. Un amor a mí mismo superior al amor a los demás me conduce a formas desequilibradas de control y superioridad sobre los otros. El amor real a los demás y a mí mismo está en Jésed, pero en Tiféret conozco dónde se encuentran los límites, porque un amor sin límites conduce a nuestro suicidio espiritual y se vuelve enfermizo.