Desafío = Oportunidad

Cuando nos enfrentamos con un desafío, debemos verlo como una oportunidad para el crecimiento espiritual en vez de intentar evitarlo. El confort y la complacencia pueden hacer que perdamos de vista nuestras prioridades, debilitando nuestro sentido de urgencia en nuestra misión espiritual. Las adversidades físicas o espirituales nos pueden sacudir de esta indiferencia, socavando nuestra seguridad y dándonos la oportunidad de avanzar en nuestra relación con el universo cuando nos abrirnos paso a través del obstáculo.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s